No hecho en algún rincón

Resumen

El desarrollo y la predicación del Evangelio no se realizó en un rincón; los cristianos deben continuar anunciándolo.

— Lectura bíblica recomendada: Hechos 26:24-29

Introducción

I. Ya que su linaje familiar era principalmente judío y su familia había gobernado al pueblo judío por muchos años, Agripa conocía «todas las costumbres y cuestiones» entre los judíos (Hechos 26:3).

II. Cuando Pablo dijo a Agripa que estas cosas no se habían «hecho…en algún rincón» (vs. 26), ¿qué quiso decir?

Exposición

I. Dios había anunciado estas cosas por mucho tiempo.

A. Pablo solamente estaba declarando lo que los profetas de Dios habían dicho por siglos (vss. 6-7, 22-23, 27).

B. Frecuentemente Jesús señaló este mismo punto en Sus enseñanzas (Lucas 24:25-27, 44; 18:31-33).

C. Los profetas declararon los sufrimientos (Isaías 53:3-5) y la resurrección (Salmos 16:8-11) de Cristo, como también la predicación del Evangelio a los gentiles (Isaías 2:2; 62:2).

II. No tomó mucho tiempo para que el Evangelio llegara alrededor del mundo.

A. Nunca se predicó el Evangelio en secreto (Juan 7:25-26; 18:20).

B. No tomó mucho tiempo para que el Evangelio se esparciera a través del mundo antiguo (Lucas 24:18; Hechos 19:10; Colosenses 1:23; 1 Tesalonicenses 1:8).

III. Nosotros debemos asegurarnos de no esconder estas cosas en algún rincón.

A. No debemos esconder nuestra luz (Mateo 5:14-16).

B. No debemos esconder nuestras obras (Juan 3:18-21).

Conclusión

I. Ciertamente los hechos de los apóstoles no pasaron desapercibidos, y los hechos de Dios son aparentes para todos (Salmos 19:1-3; Hechos 14:17; Romanos 1:20).

II. Como cristianos, ¡no debemos hacer nuestras obras en algún rincón!