«Invocar el nombre del Señor»

Resumen

Muchos declaran que «invocar el nombre del Señor» significa reconocerlo oralmente como Señor, pero ¿qué dice la Biblia?

— Lectura bíblica recomendada: Hechos 2:21; 22:16; Romanos 10:13

Introducción

I. Se promete la salvación a todos los que invocan el nombre del Señor.

II. Nuestro destino eterno depende del entendimiento adecuado de este concepto.

Exposición

I. Lo que esta frase no significa.

A. Muchos declaran que esta frase implica un simple ruego verbal ante el Señor.

B. Jesús indicó que esto tiene un mayor significado (Mateo 7:21-27).

II. La manera en que la Biblia usa esta frase.

A. Se la usa para hacer un contraste entre la justicia y la impiedad (Génesis 4:19-26).

B. Puede indicar adoración o servicio (Génesis 12:8; 13:4; Sofonías 3:9).

C. Puede hacer referencia a la oración (Salmos 116:4; Hechos 7:59).

D. Tiene el propósito de apelar a la autoridad del nombre que se menciona.

E. El contexto debe determinar el significado de esta apelación.

III. ¿Cuándo y cómo invocamos el nombre del Señor?

A. En Hechos 2:21, Pedro declaró esta promesa a una audiencia perdida y culpable.

1. En Hechos 2:37, ellos buscaron la autoridad de Jesús al preguntar lo que debían hacer.

2. En Hechos 2:38, Pedro presentó la respuesta autoritativa de Dios.

B. En Hechos 22:16, se dio a Pablo instrucciones para la salvación de su alma.

1. Previamente él se había dirigido al Señor para pedirle ayuda (Hechos 9:6a).

2. Él pasó tres días ayunando y orando (Hechos 9:9, 11).

3. Sin embargo, tuvo que ir a Damasco para recibir instrucciones (Hechos 9:6b).

4. Se le dio dos imperativos: «bautízate, y lava tus pecados», y un participio: «invocando su nombre» (Hechos 22:16).

5. Los verbos participios adoptan el tiempo de sus imperativos; es decir, ocurren al tiempo en que los imperativos se cumplen.

Conclusión

I. La conclusión es que, como la Biblia revela, «invocar el nombre del Señor» sucede en el acto de fe que se expresa en el bautismo penitente.

II. Nosotros no tenemos el derecho de demandar más o menos que este cumplimiento (Gálatas 1:6-9).

III. Por tanto, instamos a todos a invocar el nombre del Señor de la manera que Él prescribe