¿Puede Dios hacer cualquier cosa?

Resumen

Aunque muchos han pensado que la omnipotencia significa que Dios puede hacer cualquier cosa, este concepto es falso.

Pregunta

«¿Puede Dios hacer cualquier cosa?».

Respuesta

Tanto los cristianos como los ateos han supuesto generalmente que, si el Dios de la Biblia existe, entonces Él puede hacer cualquier cosa—ya que se Lo describe como un ser todopoderoso. Sin embargo, esta suposición es incorrecta. La Biblia no declara que la omnipotencia de Dios implica que Él pueda hacer cualquier cosa o toda cosa. En realidad, por definición, «omnipotencia» no implica, y no puede implicar, aquello que no se aplica al poder. Los escépticos y ateos han propuesto algunas preguntas que piensan que anulan la omnipotencia; por ende, supuestamente han demostrado que Dios no existe. Por ejemplo: «¿Puede Dios crear una piedra tan grande que Él mismo no pueda levantar?».

Aparte del hecho de que Dios no es físico y que Él creó el universo completo físico (aunque es metafísico y trasciende el universo), la pregunta previa es un concepto absurdo. Es como preguntar: «¿Puede Dios crear un cuadrado redondo o un triángulo de cuatro lados?». No, no puede hacerlo—pero no por la razón que los ateos implican: que Él no existe o que no es omnipotente. En cambio, la razón es que la pregunta es auto contradictoria e incoherente. Es una terminología sin sentido. En vez de decir que Dios no puede hacer tales cosas, se debe decir, en armonía con la realidad, que no se pueden realizar tales cosas en absoluto. Dios tiene poder infinito, pero el poder se relaciona razonable y solamente a lo que se puede hacer, lo que es posible lograr—¡no lo que es imposible! Es absurdo hablar de algún poder (incluso un poder infinito) que hace lo que no se puede hacer. Las contradicciones lógicas no se relacionan a lo que se puede lograr, y por ende no están sujetas al poder, ni incluso al poder infinito.[1]

Además, sugerir que Dios es deficiente o limitado en Su poder ya que no puede crear una roca tan pesada que no pueda cargar, es implicar que Él pudiera hacerlo si solamente tuviera más poder. Pero esto es falso. Crear una roca que Él mismo no pueda cargar anula la omnipotencia misma, ya que, si Él fuera omnipotente en tal sentido, debería poder cargar la roca. Tal proposición no es una proposición en absoluto. Aunque la gente puede imaginar absurdidades lógicas que no se pueden lograr, estas no constituyen un argumento legítimo contra el poder infinito de Dios.

Así que, el concepto de la «omnipotencia» no significa que no haya límites para lo que la omnipotencia pueda hacer. Aunque Dios puede hacer todo lo que es posible hacer lógicamente, en realidad, hará solamente lo que está en armonía con Su naturaleza. De hecho, la Biblia señala cosas específicas que Dios no puede hacer. Por ejemplo, declara que Dios no puede mentir (Números 23:19; 1 Samuel 15:29; 2 Timoteo 2:13; Tito 1:2). Él es un ser cuya misma naturaleza implica verdad. El engaño está en conflicto absoluto con Su naturaleza divina.

Otra imposibilidad concerniente al poder de Dios es el hecho de que Él no hace acepción de personas o favoritismo (Deuteronomio 10:17; Romanos 2:11; Colosenses 3:25; 1 Pedro 1:17). Él es imparcial con todas Sus criaturas. Se puede confiar en que Él interactuará con Sus criaturas de la manera que dijo que lo haría. La manera en que nos trata se relaciona a nuestro propio comportamiento escogido—no a nuestra etnia o color de la piel (Hechos 10:34-35; 1 Samuel 16:7).

Un tercer caso que determina el significado bíblico de «omnipotencia» se ve en la incapacidad de Dios de perdonar a una persona que no se arrepiente o deja su pecado (Josué 24:19; Proverbios 28:13; Mateo 6:15; 18:35; Lucas 13:3,5). Aunque la misericordia y el perdón de Dios son grandiosos, es imposible que Él otorgue perdón a la persona que no busca tal perdón al someterse a las precondiciones de la remisión de pecados. Dios no tiene la capacidad de otorgar perdón a través de otro medio diferente a la sangre de Jesús y la obediencia al Evangelio de Cristo (Romanos 1:16; 2:8; 2 Tesalonicenses 1:8; 1 Pedro 4:17; Juan 3:7).

Cuando alguien estudia más la Biblia, examinando los atributos y las características de Dios descritas en su contenido, llega a ser más impactado con (1) la inspiración de la Biblia—ya que su presentación de tales temas la eleva más alto que cualquier acusación exitosa de contradicción, y (2) la admiración de la infinitud de Dios. Ninguno de los factores abordados en este artículo afecta negativamente la realidad de la omnipotencia de Dios. Por tanto, es claro que una persona puede vivir de tal manera que «incapacite» a Dios para ayudarlo. Entonces, es importante que cada ser humano reconozca la necesidad de entender Su voluntad y moldear su comportamiento a tal voluntad. Es importante que cada persona evite llegar a la condición precaria de necesitar lo que Dios no puede hacer por él.

[1] Warren, Thomas (1972), ¿Han probado los ateos que Dios no existe? [Have atheists proved there is no God?] (Jonesboro, AR: National Christian Press), pp. 27et.seq.