¿De qué manera Dios prueba que es Dios?

Resumen

El Dios de la Biblia es único. Él prueba esto a través de Su conocimiento del futuro, pues anuncia el fin desde el principio.

Una de las maneras llamativas en que Dios prueba Su existencia y Se distingue de los dioses falsos es al demostrar Su conocimiento perfecto del futuro. Tal vez en ninguna otra parte de la Biblia este hecho sea más claro que en Isaías 45-46, donde Dios señala que solamente Él es el Amo de la historia, capaz de predecir eventos antes de que ocurran. Mientras que los ídolos son impotentes, y los gobernantes humanos están cegados ante lo que yace adelante, solamente Dios conoce y moldea el curso de la historia. Su capacidad de declarar el futuro prueba que solamente Él es Dios.

El reto de Dios para las naciones

En Isaías 45, Dios habla a través del profeta a Ciro, el rey persa, más de un siglo antes que Ciro incluso naciera.[1] El Señor declara: «te llamé por tu nombre; te puse sobrenombre, aunque no me conociste» (vs. 4). Esta profecía es impresionante: Dios identifica a Ciro antes de que aparezca en la historia y declara que este sería el instrumento para la liberación de Israel. Isaías 46 continúa este tema. En este capítulo, Dios Se contrasta con los ídolos de Babilonia, los cuales deben ser cargados en las espaldas de los animales (vss. 1-2). Estos dioses falsos son abrumadores, impotentes y mudos. Por otra parte, el Señor declara: «yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho» (vss. 9-10).

Este es un reto directo para cualquiera que dude de la existencia de Dios o del conocimiento divino perfecto del futuro. A diferencia de los ídolos sin vida que requieren manos humanas que los transporten, Dios dirige la historia misma. Ninguna deidad pagana puede hacer esto. Los dioses y las imaginaciones falsas de los paganos permanecen en silencio ya que no tienen conocimiento del futuro. Pero el Dios verdadero predice y asegura lo que acontecerá.

Conclusión

La capacidad de Dios para declarar el futuro es una revelación de Su divinidad. Por esta razón la profecía en cuanto a Ciro es muy significativa. Ciro fue un rey que no conocía al Dios verdadero, al Dios de Israel, pero cumplió la voluntad de Dios precisamente como fue predicha. Las acciones del rey persa no estuvieron fuera de la influencia de Dios, sino fueron parte de Su plan divino. Esta verdad tiene la intención de proveer consuelo al pueblo de Dios. Si solamente Dios conoce el futuro, y si el futuro se desarrolla según Su propósito, entonces los que confían en Él no necesitan temer. Los israelitas pudieron haber dudado de su Dios, pero Isaías les hizo recordar que su liberación estaba asegurada ya que Aquel que revela el futuro también es el Amo del futuro.

El Dios de la Biblia es el único Dios. Él prueba esto a través de Su conocimiento perfecto del futuro. Solamente Él puede declarar el fin desde el principio.

[1] Para la evidencia de que el libro de Isaías se escribió en el siglo VIII a. C. (cf. Isaías 1:1), ciento cincuenta años antes de Ciro de Persia, vea el comentario de Isaías de Clyde M. Woods, el comentario de John Oswalt, y el comentario de E. J. Young.