Renovación Espiritual

Lectura bíblica recomendada: Juan 3:3-5

Introducción

I. Muchos hemos escuchado el cuento de Ebenezer Scrooge, quien tuvo un cambio repentino de corazón después de la visita de tres espíritus.

II. La Biblia registra historias verdaderas de cambio de carácter, y una de las más remarcables es la de Saulo de Tarso.

Exposición

I. Saulo fue realmente renovado.

A. Anteriormente Saulo se había enorgullecido y había puesto su confianza en su nacimiento físico (2 Corintios 11:22; Filipenses 3:4-6), pero él dejó de hacerlo (Gálatas 1:1; 6:14-15).

B. Aunque agradar a los hombres había sido su propósito principal en el pasado, su nueva meta llegó a ser solamente agradar a Dios (Gálatas 1:13-14).

C. Cuando el antiguo Saulo “murió”, uno nuevo nació (Hechos 22:16; Gálatas 2:20).

II. Saulo no fue el único que necesitó renovación.

A. Ya que todos hemos pecado (Romanos 3:23), todos necesitamos la gracia salvadora de Dios (cf. Efesios 2:1-9).

B. Como Jesús dijo a Nicodemo, todos debemos nacer de agua y del Espíritu (Juan 3:5; Gálatas 3:26-29).

C. El bautismo marca el comienzo de una vida nueva con Cristo (Romanos 6:4,16-18; 2 Corintios 5:17).

D. Desde luego, esta nueva vida solamente es posible debido a la resurrección de Cristo (Efesios 1:19-20; 2:4-9; Colosenses 2:11-13; 1 Pedro 3:21).

Conclusión

I. Si cree en Cristo, ¿por qué no obedece a Su mandamiento de revestirse de Él en el bautismo (Gálatas 3:27)?

II. Si ha olvidado que ha sido lavado de sus pecados pasados (2 Pedro 1:9), ¿por qué no regresa a Él hoy?