La parábola del trigo y la cizaña

Resumen

Hoy el Señor permite pacientemente que los hijos del malo coexistan con los buenos, pero un día pondrá las cosas en orden.

— Lectura bíblica recomendada: Mateo 13:24-30,36-43

Introducción

I. Esta parábola muestra los esfuerzos diabólicos de Satanás por sabotear los buenos esfuerzos de Dios.

II. Se puede ver claramente la sabiduría y paciencia de Dios mientras Él espera el tiempo de la cosecha para destruir las hierbas malas.

III. Existe una advertencia fuerte y consuelo tremendo en saber que Él hará justicia completa y final.

Exposición

I. El conflicto.

A. El dueño del campo solamente sembró buena semilla (vs. 24).

B. Un enemigo malicioso trató de sabotear el sembradío por medio del engaño y la trampa (vss. 25,28).

II. Los personajes y el escenario.

A. Jesús es el Sembrador que solamente siembra buena semilla (vs. 37).

1. La gente frecuentemente culpa a Dios por el mal en el mundo.

2. Esta parábola muestra la necedad de esta acusación (cf. Santiago 1:17).

B. Los males en el mundo caído son obras de Satanás, no del Señor (vss. 38-41).

III. La advertencia.

A. Muchos que declaran servir a Dios han intentado quitar a la fuerza lo que han percibido como mal en la tierra (por medio de las cruzadas, inquisiciones, procesos a las brujas, etc.).

B. El sembrador tuvo un enfoque diferente (vss. 28-30).

IV. El punto culminante.

A. A su tiempo debido, Dios juzgará a los malos y pondrá las cosas en orden (vss. 41-42; Hechos 17:30-31; Romanos 2:2,5-10; 2 Tesalonicenses 1:7-9).

B. Tristemente, el castigo será severo y sin término (Marcos 9:47-48).

C. Por otra parte, los hijos del reino recibirán la gloria que Dios ha prometido (vs. 43; Mateo 25:46; Romanos 8:30).

Conclusión

I. Aunque sea difícil entenderlo, el Señor permite pacientemente que los hijos del malo coexistan con los buenos en Su mundo hasta el juicio final.

II. La esperanza en esta parábola es el conocimiento de que al final Él pondrá las cosas en orden.

III. Usemos este conocimiento para perseverar pacientemente mientras aguardamos Su justicia.