Hacia la meta

Resumen

El tiempo pasa más rápido de lo que pensamos; ¡nunca nos detengamos en nuestro esfuerzo de alcanzar la meta del cielo!

— Lectura bíblica recomendada: Filipenses 3:7-14

Introducción

I. Cuando nos trazamos metas, lo hacemos en áreas que son importantes para nosotros.

II. Tenemos metas a corto y largo plazo, y es importante que tengamos expectativas razonables en cuanto al tiempo y la energía que se requiere para alcanzar tales metas.

Exposición

I. Debemos aseguramos de fijar metas correctas.

A. En la Biblia leemos en cuanto a personajes que fijaron metas equivocadas (Mateo 19:16-22; Lucas 10:38-42; 12:16-21; Gálatas 1:10).

B. Leemos en cuanto a otros, como Nehemías (2:5), Daniel (1:8) y Jesús (Lucas 19:10), que tuvieron metas adecuadas.

C. Al fijar metas, primero debemos determinar lo que es importante para nosotros (Mateo 6:20).

II. Hay algunos principios básicos para alcanzar las metas.

A. No tendremos éxito en alcanzar nuestras metas sin un plan adecuado (Mateo 13:20-22; Lucas 14:26-33).

B. Debemos establecer nuestras metas como una prioridad (cf. Mateo 10:37-39).

C. Debemos estar dispuestos a renunciar a cualquier cosa que se cruce en el camino a alcanzar nuestra meta (Lucas 19:8-10; Filipenses 3:8-9).

D. Especialmente cuando enfrentamos tiempos difíciles, debemos mantener nuestra mirada en la meta final (Gálatas 6:7; Filipenses 3:14; 2 Timoteo 1:12; 4:8).

Conclusión

I. Como cristiano, ¿está en el camino al éxito?

II. Ya que el tiempo pasa más rápido de lo que pensamos (Efesios 5:16), ¡nunca nos detengamos en nuestro esfuerzo de alcanzar la meta del cielo!