Buenos administradores de nuestro dinero

Resumen

Los cristianos deben usar el dinero responsablemente, sabiendo que todo pertenece a Dios y que un día darán cuenta a Él.

— Lectura bíblica recomendada: Proverbios 30:8-9

Introducción

I. Al pensar en el dinero, primero debemos considerar que todo pertenece a Dios (1 Crónicas 29:14; Salmos 50:10-12).

II. Daremos cuenta de la manera en que usamos los medios financieros que Dios nos da aquí en la tierra. ¿Cómo deberíamos usar el dinero?

Exposición

I. El dinero puede ser una bendición o una maldición.

A. El dinero puede ser bueno (Proverbios 19:6-7; 1 Timoteo 5:8).

B. También puede ser peligroso (Proverbios 11:28; 27:20; Eclesiastés 5:10-12).

C. Hay muchas cosas más valiosas que el dinero (Proverbios 11:4; 16:16; 22:1; 23:4-5).

II. Un buen administrador siempre adquiere dinero honestamente.

A. Debe realizar un día completo de trabajo por un día completo de pago (Proverbios 10:4; 20:4; 28:19; 2 Tesalonicenses 3:10).

B. Nunca debe poner en riesgo su integridad con el fin de obtener ventaja financiera (Proverbios 20:10,17; 21:6; 22:16).

III. Un buen administrador es cuidadoso en cuanto a la manera en que gasta su dinero.

A. Primero, da generosamente (Proverbios 3:9; 11:25; 19:17).

B. Considera cuidadosamente lo que adquiere (Proverbios 21:17).

C. Siempre paga sus deudas a tiempo (Proverbios 3:27-28).

D. Considera los gastos futuros (Génesis 41:47-49; Proverbios 6:8).

E. Trata de dejar una herencia para la siguiente generación (Proverbios 13:22; 20:21).

Conclusión

I. La clave de la felicidad no es el dinero, sino el contentamiento (Filipenses 4:11).

II. Al planear nuestro presupuesto para el próximo año, recordemos que todo lo que tenemos en esta vida pertenece a Dios.