¿Por qué hablas tanto en cuanto a Jesús?

¿Por qué hablas tanto en cuanto a Jesús?

Un jefe indio anciano constantemente hablaba del Señor Jesús y de lo que significaba para él.

Un amigo le preguntó: «¿Por qué hablas tanto en cuanto a Jesús?».

El anciano no respondió, sino lentamente juntó algunas ramas y un poco de hierba. Hizo un círculo con esto.

En el círculo colocó a una oruga. Sin hablar, prendió un fósforo e hizo un pequeño fuego con las ramas y hierba.

Ellos observaron a la oruga. Cuando el fuego se esparció en el círculo, la oruga atrapada comenzó a arrastrarse rápidamente en busca de una salida. Cuando el fuego avanzó, la oruga desesperada levantó su cabeza tanto como podía. Si la criatura hubiera tenido la capacidad de hablar, hubiera dicho: «Mi ayuda solamente puede venir de arriba».

Luego el anciano se inclinó y extendió su dedo a la oruga, la cual subió a su dedo y finalmente estuvo a salvo.

Con rostro intenso, el anciano dijo: «¡Esto es lo que el Señor Jesús hizo por mí! Yo estaba perdido en pecado. Mi condición no tenía esperanza. Estaba atrapado. Luego el Señor Jesús Se inclinó. Con amor y misericordia, me sacó del hoyo terrible del pecado y la vergüenza. ¿Cómo puedo evitar amarlo y hablar de Su amor y protección maravillosa?».

—Autor Desconocido