Resolviendo los Malentendidos con Sabiduría

Resumen

Al lidiar con los conflictos que surgen en la iglesia, debemos considerar la sabiduría atesorada en la Escrituras.

— Lectura bíblica recomendada: Josué 22:33-34

Introducción

I. Los malentendidos son comunes, y de vez en cuando todos experimentamos problemas en comunicarnos. Sin embargo, Dios nos ha dado Su Palabra como una guía para resolver los problemas de comunicación.

II. Durante el periodo de posesión de la Tierra Prometida, cuando las tres tribus del oriente regresaron a su tierra, edificaron un altar “de grande apariencia” en los límites del Jordán (Josué 22:10).

III. Las tribus occidentales interpretaron tal acto como una desviación de los mandamientos de Dios (Josué 22:11-12,19, cf. vs. 5). ¿Qué aprendemos de esta historia en cuanto a la manera de lidiar con los malentendidos?

Exposición

I. Se debe lidiar con los malentendidos de manera diligente.

A. Las tribus occidentales no fueron indiferentes en cuanto a lo que sucedía en su territorio y con sus hermanos (Josué 22:12).

1. Tal prontitud se debió a su temor a Jehová (Josué 22:17,20).

2. Ellos sabían muy bien que “un poco de levadura leuda toda la masa” (1 Corintios 5:6) y que las consecuencias del pecado también alcanzan a otros (Josué 22:18).

B. Cuando enfermamos gravemente, buscamos medicina con diligencia. De la misma manera, debemos lidiar diligentemente con los conflictos en el cuerpo de Cristo (cf. Mateo 18:15; Efesios 4:26; 2 Timoteo 4:2).

II. Se debe lidiar con los malentendidos al buscar ayuda de gente espiritual.

A.    Las tribus occidentales enviaron a Finees, hijo del sacerdote Eleazar, y a 10 príncipes y jefes de entre las 10 tribus (Josué 22:13-14).

B.   Para lidiar con los conflictos en la iglesia, se debe buscar a gente que contribuya a la paz, la espiritualidad y el buen juicio (cf. Mateo 5:9; 18:16-17; 1 Corintios 6:5; Gálatas 6:1).

1. Los espirituales son aquellos que pueden discernir lo espiritual (1 Corintios 2:13-16).

2. Los espirituales son aquellos que respetan los mandamientos de Dios (1 Corintios 14:37).

3. Los espirituales son aquellos que son fieles (Filipenses 4:3).

III. Se debe lidiar con los malentendidos de una manera objetiva.

A. Las tribus occidentales hicieron una pregunta clara y precisa, y de la misma manera obtuvieron una respuesta correspondiente (Josué 22:16,24).

B. También presentaron una solución posible e imparcial (Josué 22:19).

1. Las soluciones imparciales evitan los caprichos personales y contribuyen al bienestar general (Romanos 15:2).

2. La solución tenía como meta conservar la unidad y el respeto a Dios (cf. Efesios 4:3).

IV. Se debe lidiar con los malentendidos considerando el amor a Dios y al prójimo.

A. En su defensa ante sus hermanos, las tribus orientales invocaron con temor dos veces el nombre del Señor (Josué 22:22-23).

1. Al lidiar con conflictos en la iglesia del Señor, se puede comenzar con una oración.

2. Se puede proseguir con la lectura de principios bíblicos que ayuden a resolver conflictos.

B. Ambas partes consideraron el asunto con seriedad, escuchándose con respeto.

1. Las tribus orientales no ignoraron la demanda de sus hermanos. Por otra parte, sus hermanos escucharon la explicación de las tribus orientales en cuanto a la edificación del altar (Josué 22:30).

2. La Biblia nos manda a considerar a nuestros hermanos con respeto (Filipenses 2:3).

3. La Biblia nos manda a valorar al que tiene algo en contra nuestra (Mateo 5:24).

C. Debemos tener un espíritu humilde y abierto, ya que podemos estar equivocados (Proverbios 3:7; 14: 12; Jeremías 10:23; Isaías 55:8-9).

1. La humildad y la mansedumbre son cualidades necesarias en la solución de conflictos (Mateo 11:29).

2. Debemos ser sobrios y velar para no ser tentados por el diablo (1 Pedro 5:5-8).

Conclusión

I. La manera diligente en que se lidió con el conflicto permitió que se llegara a un entendimiento pacífico (Josué 22:30-33).

II. Nosotros deberíamos seguir el ejemplo de las tribus de Israel al implementar los pasos necesarios para la solución de malentendidos.

III. Cuando se trata de malentendidos, el mejor camino que tomar es el que nuestro Señor nos dejó: “soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros” (Colosenses 3:13).