Mi Vida Es Más de lo que Tengo

Resumen

Si nuestro valor personal se basa en las cosas que tenemos, entonces nunca llegaremos a ser verdaderamente felices.

Lectura bíblica recomendada: Eclesiastés 5:10-20

Introducción

I. El valor de la vida humana no se basa en ningún estándar físico o material (cf. Génesis 1:26-27; 9:6).

II. Existen dos clases de materialismo:

A. La confianza en las cosas que no tenemos (Mateo 6:25-34).

B. La confianza en las cosas que tenemos (Lucas 12:16-21).

Si mi vida es más de lo que tengo, entonces…

I. No debo trabajar solamente para tener (Eclesiastés 5:10-12).

A. Muchas personas en el mundo trabajan solamente para acumular bienes materiales.

B. El Rey Salomón dedicó gran parte de su vida a este esfuerzo, pero al final concluyó que el todo del hombre es temer a Dios y guardar Sus mandamientos (Eclesiastés 12:13).

C. Jesús dijo: “Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece” (Juan 6:27).

D. Aunque tener cosas no es inherentemente malo, nuestra meta en la vida no debe enfocarse en la obtención de bienes materiales (Mateo 6:33).

II. Debo compartir lo que tengo (Eclesiastés 5:13-14).

A. Será más fácil compartir cuando consideremos que todas nuestras bendiciones proceden de Dios (Santiago 1:17).

B. La actitud egoísta causará que pensemos solamente en nosotros mismos y actuemos como si los demás no existieran (Lucas 12:16-21; 16:19-21).

C. La actitud egoísta evitará que seamos realmente felices (Hechos 20:35).

D. Todos podemos compartir algo (cf. Éxodo 34:20). Podemos compartir nuestro dinero, casas, autos, tiempo, sonrisas, palabras de ánimo, talentos, sabiduría y labor.

III. Debo entender que no tengo (Eclesiastés 5:15-17).

A. Aunque usualmente hablamos de las cosas que “tenemos”, en un sentido fundamental, realmente no tenemos.

1. Todas las cosas pertenecen a Dios (1 Corintios 4:7).

2. Lo único que el hombre puede reclamar como propiedad exclusiva es su pecado (Salmos 51:3; Ezequiel 18:20).

B. Ya que toda bendición procede de Dios, entonces debemos usar lo que “tenemos” para glorificar a Dios (1 Corintios 10:31).

C. Entender este principio nos ayudará a discernir dónde debería estar nuestro tesoro (Mateo 6:19-21).

D. En el fondo, nada material hemos traído al mundo y nada material llevaremos al Más Allá (Job 1:21).

IV. Debo estar satisfecho con lo que tengo (Eclesiastés 5:18-20).

A. Si nuestro gozo se basa en la búsqueda de cosas que no tenemos, entonces nunca seremos verdaderamente felices y nunca estaremos verdaderamente satisfechos.

B. Siempre habrá alguien que tenga algo en mayor (o mejor) proporción que nosotros—sea más dinero, una casa más grande, un auto más lujoso, una mejor profesión, mejor salud, mejor voz, mejores talentos, una piel más suave, un cabello más fino o un rostro más atractivo.

C. La satisfacción es algo que se aprende (Filipenses 4:11).

D. Contar nuestras bendiciones materiales nos ayudará en nuestra búsqueda de satisfacción.

E. Contar nuestras bendiciones espirituales como cristianos nos ayudará a sentirnos completamente satisfechos.

Conclusión

I. ¿Qué es su vida?

II. ¿Está satisfecho con su vida?