La iglesia del Nuevo Testamento: Los diáconos

Resumen

Los diáconos realizan una gran variedad de trabajos, permitiendo que otros líderes en la iglesia cumplan sus roles.

— Lectura bíblica recomendada: Hechos 6:1-7

Introducción

I. El segundo grupo de subordinados en la iglesia son los diáconos, quienes facilitan todas las obras de la iglesia.

II. Pablo se dirigió a los diáconos juntamente con los ancianos en Filipenses 1:1, y listó sus requisitos justo después de listar los requisitos de los ancianos (1 Timoteo 3:8-13).

III. Todos estos aspectos en conjunto muestran la gran importancia de su trabajo.

Exposición

I. Los siete escogidos para servir.

A. La definición básica de la palabra «diácono» hace referencia a alguien que sirve.

B. Se puede entender mejor la función especializada de este grupo de hombres al considerar su comienzo y sus requisitos.

C. La mayoría de los estudiantes de la Biblia está de acuerdo en que Hechos 6:1-6 registra el establecimiento de este oficio.

1. El crecimiento rápido de la iglesia produjo retos de crecimiento, como el reto de atender a un grupo creciente de necesitados (Hechos 6:1).

2. La unidad de la iglesia estaba en riesgo, así que los apóstoles delegaron el cuidado de las viudas a estos hombres.

3. Aunque en Hechos 6 no se les brinda a estos hombres el título oficial de «diáconos», su trabajo es descrito por la misma raíz griega: diakoneo, distribución o servicio a las mesas (vss. 1-2).

II. La gloria del servicio.

A. El mundo ama el poder, pero Jesús exaltó el servicio (Mateo 20:20-28).

B. Sus discípulos debían seguir Su ejemplo (Juan 13:12-16).

C. Él dejó el ejemplo de atender a las necesidades de otros (vs. 15).

D. Si el Rey de reyes es un Siervo, entonces el servicio debe tener gloria (vss. 13-14, 16).

III. El valor del diaconado para la congregación.

A. La iglesia tiene el propósito de la edificación, la benevolencia y el evangelismo.

B. Los siete que fueron escogidos permitieron que los apóstoles continuaran sus esfuerzos evangelísticos sin ser distraídos con la responsabilidad de atender a las necesidades físicas.

C. El resultado de su trabajo fue el siguiente: «Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén» (Hechos 6:7).

Conclusión

I. Nuestros diáconos lidian con una gran variedad de responsabilidades, permitiendo que los ancianos apacienten la iglesia y que los predicadores se concentren en la predicación del Evangelio.

II. Otra vez, se puede ver la sabiduría de Dios en la organización de la iglesia.

III. Otra vez, se debe enfatizar que se necesita hombres calificados (con mujeres fieles) que puedan cumplir este rol importante.